Las herramientas normativas y los beneficios para exportar

Posted by iwcweb
Un proyecto exportador demanda un profundo análisis de las formas en las que se puede concretar el negocio más ágilmente y con la mayor ganancia; opciones y escenarios
Martín Clément

china_IWC

Generalmente, se mencionan algunos de los beneficios para exportar como la reducción de riesgos, el aumento del volumen de ventas, el aprovechamiento de excedente de producción, la mitigación de demandas estacionales, el desarrollo profesional de la empresa, el acceso al mercado financiero internacional y el cultivo de nuevos conocimientos y experiencias.

Pero, ¿cuáles son los beneficios concretos que existen para exportar? La Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional (Aaici) brinda servicios de consultoría, información y facilitación para detectar oportunidades de negocios e identificar obstáculos a la hora de exportar. En su sitio web hay gran cantidad de información. Aquí mencionaremos algunas herramientas normativas que ayudarán en el análisis de un nuevo proyecto exportador.

  • Reintegros a la exportación. Se trata de la devolución de tributos pagados en las distintas etapas de producción y comercialización de la mercadería a exportar, que debe ser nueva y argentina. La alícuota depende de cada mercadería (de hasta el 8,5%) y puede ser mayor si esta es orgánica o posee alguna certificación de condición ecológica, biológica u orgánica, o bien cuente con el derecho de uso del sello “Alimentos Argentinos una Elección Natural”. Su tramitación hoy es totalmente electrónica y el plazo máximo de cobro puede ser de pocos meses. Incluso antes de ese evento pueden ser usados para abonar tributos nacionales.
  • Draw-back. Cuando los productos han sido elaborados con insumos importados por el mismo exportador, este puede recuperar lo abonado en concepto de derechos y tasa de estadística. Si bien es un trámite electrónico, debe hacerse por cada exportación y su obtención puede demandar tiempos extensos.
  • Importación temporaria. El efecto es similar al draw-back aunque el trámite se realiza previo a la importación de los insumos y permite hacerlo sin pagar ningún gravamen. Se solicita un Certificado de Tipificación de Importación Temporaria (CTIT) que se usará para todas las operaciones, en las que se deberá afectar una póliza de caución. Una vez exportada la mercadería dentro del plazo otorgado (usualmente un año con una prórroga en casos justificados), dicha garantía será devuelta. Si bien es un régimen algo burocrático para administrar y su incumplimiento acarrea fuertes multas, sus beneficios pueden ser importantes si el insumo está gravado con una alícuota alta de derechos de importación y el proceso productivo nacional le otorga un valor significativo al producto respecto al valor de dichos insumos.
  • Reintegro de IVA. Existe la posibilidad de solicitar el recupero del crédito de IVA generado en la compra e incorporación de bienes y servicios en los productos exportados. Es un trámite que usualmente requiere la contratación de especialistas y demanda algunos meses para hacerlo efectivo, ya sea como un certificado transferible para pago de impuestos nacionales o bien mediante acreditación en cuenta bancaria del exportador.
  • Acuerdos internacionales para reducción de aranceles de importación. Además del Mercosur, existen otros acuerdos realizados dentro de Aladi y por fuera (Israel, India y Egipto) que reducen considerablemente los derechos aplicables, de acuerdo a la mercadería y un cronograma establecido. También existe el Sistema Generalizado de Preferencias, mediante el cual unilateralmente algunos países otorgan a otros de menor desarrollo ventajas arancelarias, especialmente sobre mercaderías que aquellos no producen.
  • Exporta Simple. Esta nueva herramienta está diseñada para permitir a quienes no se encuentren inscriptos como exportadores que lo puedan hacer, además de proporcionarles una plataforma para cotizar el flete y la logística hasta destino, con ciertas restricciones de valor, peso y dimensiones. Si bien operativamente es simple, para ciertos casos aún es una alternativa onerosa, además de no tratarse estrictamente de un sistema “puerta a puerta”.
  • Exportación por cuenta y orden. También permite exportar sin estar inscripto, a través de empresas inscriptas dispuestas a facilitar la logística. Hay alternativas para facturar la venta al exterior, aunque el reintegro será cobrado por el documentante.
  • Exportación en consignación. Una solución para exportar por un plazo determinado mercadería aún no vendida, y transformarla en definitiva o bien reimportarla si la venta no se concretó.